Pronto la mayoría de la gente se olvidará del lavado de autos para siempre. Incluso bañarse y lavarse será un problema. Ríos, lagos, embalses se están secando a tal ritmo que pronto prácticamente no habrá agua potable en la mayor parte del planeta.

Las proyecciones actuales estiman que la demanda mundial de agua dulce superará la oferta en un 60% en 2030.

La Ciudad de México, una de las ciudades más grandes del mundo, tiene una población de casi 22 millones y está creciendo de manera constante, y se espera que el crecimiento de la población alcance los 30 millones para 2030. 

La Ciudad de México es una de las 11 ciudades pronosticadas para llegar a lo que se llama Día Cero, o el día en que el agua se seca. Esto es nada menos que una crisis.

Los expertos estiman que en 30 años el 88% de la población mundial se verá obligada a vivir en regiones con escasez de agua. El cambio climático está acelerando aún más la crisis del agua.